MALDAD

Maldad... ¿De donde provienes?

¿Fuiste sembrada como una semilla en el costado del Ser Humano?

En el Barro del Suelo existen infinitas semillas..., y dentro del Edén debió haber sido igual. Si en un rincón del Paraíso, había un árbol que en su fruto estaba la Ciencia del Bien y del Mal, y en otro rincón, el árbol de la Vida Eterna, ¿Porqué no habría arbustos de avaricia, codicia o del malsano pensar o actuar?

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El hombre hecho del barro del suelo pudo haber llevado en su interior alguna de éstas semillas y del mismo modo que se heredó el conocimiento, la germinación de éstas semillas pudieron haberle creado la capacidad de ser de acuerdo al arbusto, enredadera o cizaña del que proviniera. Todo lo que se siembra en tierra fértil, brota, florece y da fruto y mientras se seleccione la mejor semilla, el fruto será más grande, nutritivo y duradero, aún cuando sea de malicia y de lasceración.

Es por ello que se considera bueno el trigo y mala a la cizaña. Aunque se les permita crecer juntos, al final serán separados y terminarán lo nefasto en el fuego y lo apropiado al granero. Y aún con eso, somos cosecha, pues el trigo, no por ser trigo dejará de ser molido, tostado y amasado.

No hay más fin a nuestro sacrificio que diferentes formas de ser consumidos.

Entonces ¿Cual es el camino?

¿Privación y sacrificio? o ¿Consumismo y libertinaje?

Pero aún con todo, hay niveles de maldad y con cada generación que pasa, nos hacemos más resistentes a sus efectos, igual que los insectos lo hicieron con el DDT, hay niveles que continuamente se van superando, pero desafortunadamente

con el tiempo serán catalogados como cotidianos y cosas peores surgirán.

Ahora hay países que arrestan a sus ciudadanos y los condenan a muerte, pero que no son ejecutados hasta que alguien adquiera un riñón, el corazón o la médula ósea del condenado.

Hay países que asesinan o expulsan a personas que han producido y creado grandes obras y negocios, tan sólo para quedarse con éstos.

Hay gobernantes que roban y dan panaceas a niños con cáncer para poder robarse el dinero destinados a los desdichados.

Entonces, podemos ver que cada día hay más cizaña que trigo, por lo tanto, algún día el trigo se extinguirá y comenzarán a surgir cosas peores que la cizaña, pues pareciera que con la mentalidad del hombre, el infierno ha comenzado a ser un lugar mejor...

J. M. Cabrera